Siguiendo el ejemplo de Sonia comparto un cuento popular que me gusta mucho:
Estaba un viejo pescador sentado a la sombra de un árbol descansando cuando se acercó un rico señor de la ciudad y le preguntó:
-¿Qué hace aquí descansando?
-Ya pesqué lo que necesito para hoy...
-Pero que desperdicio... Le voy a explicar lo que haría yo. Seguiría pescando y vendería en el mercado todo. Con los beneficios compraría otra barca y contrataría a personal que trabajarían para mi. Fundaría una gran empresa de pesca en este lugar...
-Y eso ¿de qué le serviría?
-Bueno, tendría mucho tiempo libre con la gente trabajando para mí para hacer lo que realmente me apeteciera...
-Eso es justo lo que yo estoy haciendo
(y sin esquilmar el río, lago o mar, añado yo)
***
Besos, todos los posibles y feliz domingo.
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