viernes, 19 de septiembre de 2008

Barrio


MI BARRIO


Al subir la escalera aun se huele a comida casera, de la de verdad y no precocinada.
En cualquier momento se puede oír cantar o tocar una guitarra con un arte que no han tenido que aprender en ningún conservatorio.
Hay flores en los balcones ¡y hasta judías y tomates!
Los vecinos de la escalera nos conocemos todos.

También quedan cazadores furtivos que aun intentan sacar unas pelillas atrapando fungínidos.
Y niños que tiran el brik de batido en cualquier sitio.
Y coches con su música a tope.
Y niños que juegan al balón entre coches...

Convivimos en una extraña armonía, la alcohólica separada que siempre tiene una frase bonita y una sincera sonrisa con mis hijas, la ludópata que de vez en cuando lo pierde todo en el casino, la hipocondriáca que después de haber sufrido muchas enfermedades imaginarias ha acabado enfermando de verdad, el trabajador incansable, el chulillo del barrio, el guaperas que es el tío más bueno que he visto en mi vida y que en los días de calor nos regala la vista quitandose la camiseta y paseando su piel tostada por la pasalela del mundo, el que habla mucho no dice nada, la gruñona, la sonrisas, la que parece invisible porque anda escondiéndose, la pija a la que le da corte admitirlo, los rastas, los de la farmacia ilegal, el delegado sindical, las que se vocean de balcón a balcón, las que solo susurran y miran de reojo, la mulata de ritmo interior, el serio negro de dientes blancos escondidos, la pispireta incansable, el jubilado paseante...
Yo supongo que seré la loca del barrio... pero soy consciente de que todo esto no son más que estereotípos.

Después de más de diez años de llegar a este gueto en que se han convertido las casas sociales las circustáncias de cada una han cambiado mucho.
Hay quien ha ganado tanto que ha comprado una segunda casa. Otros apenas pueden pagar el recibo de la comunidad.
Otros hemos salido hacia delante con gran fortuna y mucho trabajo (¿hay otra manera, honrada, de hacerlo?)
Ahora, cuando me planteo si sería o no conveniente cambiar (tampoco puedo permitírmelo pero planteármelo, me lo planteo) tengo un sentimiento ambivalente.

Un día, mientras recortaba un código de barras del tetra-brik de la leche para mandar a un concurso de esos que te tocan millones, me preguntaron mis hijas para que era:
-Pues, si nos toca, podríamos tener una casita con jardín, un perro peludo... -No pude seguir. Se echaron a llorar.
-Nosotras no queremos irnos de esta casa. Es nuestra casa de los sueños.

Creo que me quedo en mi barrio. Con todo lo bueno y lo malo.

Me gusta mi barrio. Algunos no lo entienden. Yo lo siento mío y lo disfruto.


7 comentarios:

nurimoon dijo...

Hola, llegue acá por el blog de Sabrina, me gusto mucho lo que le pusiste de la libertad y de la importancia de conocerse uno mismo antes que "intentar" conocer y entender a los démas.

Y es lo mismo con tu casa, nuestro nido lo hacemos nosotros, así que en donde te sientas realmente confortable y segura ese es tu "hogar" no importa ni el tamaño ni las comodidades, siempre y cuando sea cálida y por tus palabras imagino que es así.
saludos y mucho gusto.
Ah. tambien me encanto tu post de piel, así andamos todas, será una crisis femenina normal??

Amparito dijo...

Gracias, a mi tambien me gustan tus comentarios
Sienta bien no sentirse tan sola
Besos, todos los posibles
Amparito

cristal00k dijo...

Se ve bonito, desde tu ventana. He sentido nostalgia de la "escalera" materna al leerte. En cada rincón del mundo sigue habiendo todo un universo de gentes y de vida. Y tú lo has transmitido hoy, mejor que bien!
Sigue disfrutándolo con los tuyos.

Más sonrisas!

Anónimo dijo...

Realmente, el barrio es la patria de cada uno.
Un texto precioso, porque huele a raíces, a recuerdos, a vivencias.
Si te sientes a gusto, nada importa si lo entienden los demás o no.
Besos y cuídate.

Nicolás Corraliza dijo...

El barrio, la patria, todos esos terminos los construimos nosotros.Si estamos agusto en un sitio con nosotros y con nuestro entorno, ese será nuestro barrio.Nuestros hijos, una buena pareja y algún amigo, son la verdadera patria y creo que eso lo tenemos los dos.
Barrios, todos los posibles, besos también.

El barruntador dijo...

No puedo pasar sin decirte que eres un encanto. No me extraña mi afición a leerte. Aún si estuviera en desacuerdo contigo serías una delicia de persona. ¡Qué suerte tiene tu pareja!. Como madre ya te lo dije alguna vez. Un Abrazo sonrisa bonita.

Amparito dijo...

Gracias
En el barrio abierto de mi corazón estais todos
Besos, todos los posibles,
Amparito