De vez en cuando vacío mi bolso para quitarle lastre. Todas esas chuminadas que vamos acumulando las mujeres encima... Pero como yo soy poco práctica acabo quedandome con las chuminadas... como esa piececita de plástico azul de algún juguete y que a mi me sirve para dar las gracias cada vez que la siento rebuscando algo en el caótico interior de mi bolso.
Este año, entre otros propósitos, va ha ser el año del orden. Ya lo está siendo. No me siento bien tirando cosas. No creo en esta cultura del usar y tirar. Pero si que algo te pide que te renueves y que simplifiques tu vida. Voy a escucharlo y hacerle caso.
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1 comentario:
Lo que no e gusta tanto es ese orden de los libros de colecciones. Las colecciones, si hay alguno de ellas en mi casa, conviven racional (o irracionalmente con todos, sin distinció); el yo-yo es tan necesario como la pieza azul, saberlo girar y saberlo mirar, saberlo dormir; y bajo el número 13, empiezas diciendo que 'Afuera es mañana' y mencionas a Pablo o Paolo. Bueno, Paolo Conte es una buena referencia.
Abracicos.
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