Oda a la mala eduación

Escupiré al suelo
cuando la vida me de asco.

Cerraré de un portazo
cuando las palabras no expresen
todo mi enfado.

Alimentaré gatos callejeros
cuando hasta los ratones
hayan huido de este pantano.

Gritaré bien alto
a todos los que nunca levantaron la voz,
ni lo necesitaron,

Me ensuciaré de tierra
las uñas de las manos
cuando esa sea la única tierra
que puedan tener mis hermanos

Y hablaré con la boca llena
Bostezaré ante demagogos
Eructaré en la cara
de quien,
con muy buenas formas,
eso siempre, por dios santo,
nos deja en la más pura miseria
de dignidad,
de subsistencia
real,
intelectual
y moral.


Y maldeciré hasta a dios
si con eso me escuchan
sus excelencias.
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