domingo, 2 de noviembre de 2008

El Camino

Hacer el camino de Santiago en bici es lo que ella siempre había deseado. Y ese año todos los astros se habían confabulado para que lo consiguiera:
Mes libre, dinero suficiente, buen estado de salud, buen tiempo climatológico...
Así que inicio la primera etapa en el Puerto de Somport.
Cuando solo llevaba unos kilómetros recorridos, maravillándose del paisaje pirenaico, algo choco contra su bici.
Al abrir los ojos la escena le pareció surrealista:
Un ciervo yacía su derecha respirando con dificultad. Era enorme y podía sentir su olor a piel húmeda y barro.
A su izquierda había un hombre vestido de uniforme le cogía la cabeza con delicadeza.
Era como si le conociera de toda la vida aunque nunca lo hubiera visto hasta ahora.
Él le preguntó: -¿Nos conocemos?
Ella sintió que comenzaba el viaje más apasionante de su vida:
-En esta vida, al menos, no...
(Este no continua... tendréis que imaginaos como sigue la historia. Y por cierto, este es ficción)

3 comentarios:

nurimoon dijo...

Hola Amparito, Ah!!! El camino de Santiago es un sueño para mi y una amiga lo vamos a empezar el día que cumplamos 40 años, lo voy a hacer con mi mejor amiga y sera un autoreconociento espiritual, porque con con puedes ser tu misma más que con tu amiga que te conoce a veces mejor que tu misma.
Estare pendiente de tu historia para inspirarnos más al hacerlo.
saludos

Anónimo dijo...

Pienso que al chocar se golpeó la cabeza y perdió la memoria. "Al viaje más apasionante de su vida" y "En esta vida, al menos, no" creo que lo primero se refiere al "viaje" que tiene que hacer a partir de ahora y la segunda frase hace referencia a "otra vida", esa otra vida puede ser la vida que tenia antes de perder la memoria, lo dice inconscientemente, claro. Bueno, en realidad la historia tiene pinta de ser más mágica y mi interpretación es demasiado lógica. Mejor dejo de divagar :P

adriana dijo...

Ay.. pero que te coge con estas historias que me dejan estos dientes largos de querer saber más... qué sigue?